Mis Seguidores

lunes, 13 de mayo de 2019

CUANDO TODOS LEÍAN A A.J ROB

      Hace tanto de esta época de la que tanto le hablaron, que hasta sus recuerdos eran en blanco y negro, todo lo que se leía y se veía era así, hasta sus páginas se tornaban grises. 

Según le contaron, fueron tiempos agitados, como si a todos ellos y todo lo que pasaba, estuviese metido en una coctelera y lo agitasen fuertemente, todo causaba ruido, mucho revuelo aquí y allá, Pero sobre todo, aquel ser misterioso que emergió repentinamente de no sé que páginas y que causaba gran estupor entre la gente, incluso entre las más altas esferas. 

Nadie sabía quien era, ni siquiera sabían si era hombre o mujer, ni sabían de donde había salido, de un día para otro se encontraron sus páginas en sus librerías, y artículos cada vez más frecuentes de ese personaje al que ni por su forma de escribir sabían identificar, tan solo tenían cinco letras, un nombre o seudónimo, porque ni tan siquiera sabían si era real, solo le podían llamar A.J ROB. Cualquiera podría pensar que era un hombre, por aquello de Rob, pero ¿qué había de A.J?, bien podían ser siglas de mujer, o solo un alias, un callejón sin salida. ¿Y por qué tanto jaleo alrededor suyo?, por lo que escribía, porque escribía pequeños relatos de sucesos, como pequeñas novelas negras, aparentemente inventadas, que sin embargo, y si uno las leía atentamente, parándose en los detalles, tenían entre líneas, cosas de casos reales, de hecho sus relatos, inevitablemente se asemejaba a ellos. En ocasiones, parecía incluso contar cosas que no se habían hecho públicas, y yendo un poco más allá, planteaban cuestiones que ni la misma policía en su investigación, se habían llegado a hacer. 

Todos se preguntaban como era posible que supiera esas cosas, como podía ser que cayera en detalles y cuestiones que nadie más había visto. A.J ROB, de la noche a la mañana estaba en boca de todos, todos los medios hablaban de este personaje al que no sabían como tratar, era como un personaje de ficción al que hubiesen dejado caer del cielo y nadie supiera donde había caído, al tiempo que se estaba en todas partes. Preguntaron en todas partes por él, y por ella, ya que no sabían que ni quien era, preguntaron en periódicos e editoriales, incluso en librerías, y todos decían lo mismo, era un ser anónimo, sin nombre ni dirección que les hacía llegar cada una de sus líneas. 

Y pasó el tiempo sin que nadie averiguase nada, porque A.J ROB, no decía nada de todo lo que se decía, no entraba al trapo en nada de eso, era como si no pasara nada, dejaba caer su textos como si lloviese y lo dejaba estar hasta el siguiente. 

Y como llegó, se fue, dejaba que pasara más tiempo entre un relato y otro hasta no publicar ninguno. Nadie se explicaba por que, no entendían nada, no sabían si era porque se hizo mayor, o simplemente porque ya no le interesaba lo que ocurría y no quiso contar nada más, y hasta intentaron provocar su aparición desde distintos medios para ver si daba señales, pero no, no volvió a aparecer en escena. 

Solo saben que nunca llegaron a olvidar a ese misterioso ser que se hacía llamar A.J ROB.

No hay comentarios:

Publicar un comentario